
Desde los amaneceres
Algunas
Algunas musas encuentran amaneceres
Dejan que su perfume sea en la luz
Bailan entre los dedos de un niño que aun juega
Emprenden su camino temprano no les asusta la tormenta
Ni el meteorito que la asola a veces.
Algunos pedazos de cielo se descuelgan entre las lágrimas
Y una mujer les seca en su cuerpo el otoño
Amanece de nuevo plegado lucecitas
recorren lo que entre sus dedos se nace.
Algunos hombres bailan en la fundida silueta
Y se confunden sin dislocarse con otros hombres
Que se vibran en una sola música.
Algunas mujeres rozan su piel perfumándose a sí mismas
Con los destellos de los arboles que también se han fundido con el éter.
Algunos como yo estamos para otearlo
Y mirar nuestro hoy que vibra de nuevo.
Desde los amaneceres te amanezco me amaneces.
En el baile
Gano el cielo tu sonrisa
Azul en los mantos de las tierras
Sonreías de nuevo
Mi mano se hizo a un lado
Ya no se necesitaba.
Eras en el baile una mariposa
Que melosa se entregaba
A un encuentro nuevo
Mis labios ya no estaban
O se habían eclipsado solemnes.
Pedazo de pan en los dedos
De un pobre no misereado
Alegría en la piel de los niños
Mis ojos se dieron en la luz
Y se disolvieron verde.
Aun te espero en la roca
Con algo entre mis brazos
Caminos que se abren
Mis pies son de la nueva fresca
Ya están decididos.
Persecución
Calumnias contra los simples
Hechura de los pasos sencillos
Las huestes lo husmean todo se agarran de su decirse
Vigilan como oteando la debilidad
Las pequeñas pistas para la entrega miserable.
Como borbotón de sangre que busca los suelos
Se deslizan los oscuros
Como sus caras no se encuentran, vadean los edificios donde viven los que sienten.
Buscan a los que son de los amaneceres.
Boicot contra la unión de los que se aman
Palabras duras y metálicas que no seducen
Solo inquinan y desploman
Solo toman poder sobre las sombras.
La persecución ha empezado y tiene miedo de sí misma
Aunque ese es su alimento
El mismo miedo que como medalla
Identifica a los perseguidores
de la vida.
A los que son de los amaneceres.
En soledad
Te estado mirando y te levantaste entre las sombras
Tu nuevo rostro melodía dulce
Anda date en la roca, vierte sobre ella tu vado hecho de tu misma carne.
Rojizo tu beso se hizo en mí una palabra
Una disuelta rosa embebida en el rocío fresco.
Lagrima azul de tus devenires me esclavizo entre sus cuerpos.
Abrígame que tengo frio de nuevo
Te necesito dame tu aliento
Te he estado mirando y dejaste tu aliento
En un peldaño de mi primer amor.
Me era en la música de los demás
Te me hiciste en mis adentros, para ya no disolverte mas y si no me equivoco me dejaste preñado de tu sonrisa que me entibia cuando me siento solo.
2009-06-13 Ale
1 comentario:
Me gustó mucho: En soledad. Además aprendo muchas palabras leyendo tus poemas que a la vez me inspiran a más. Gracias por todo, Aioria.
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